domingo, 11 de julio de 2010

CARACTERÍSTICAS BÁSICA DEL LIDER - EDUCANDO A UN FUTURO LIDER - ORATORIA: PARTES DISCURSIVAS - MANUEL CALLE REYES




Lección 6


Autor: Lic. Manuel Calle Reyes



A. CONCEPTOS
Características básicas del líder



Muchas son las cualidades que definen al líder. En esta lección vamos a señalar aquellas que se podrían considerar básicas (son necesarias para que exista un auténtico líder), ahora estas características de donde lo obtenemos, pues del maestro por excelencia que con solo doce personas (apóstoles) funda la religión revelada por Dios mismo y hoy son mas de tres mil millones en todo el mundo, entonces, es evidente que el mejor modelo de liderazgo autentico es en la persona y naturaleza de Jesucristo. Entonces el líder debe poseer todas estas cualidades básicas, lógicamente unas más que otras, pero todas ellas deben estar presentes. La ausencia de alguna de ellas dificultaría ejercer un auténtico liderazgo. Como cualidades básicas señalamos:


Visionario: el líder se caracteriza por su visión a largo plazo, por adelantarse a los acontecimientos, por anticipar los problemas y detectar oportunidades mucho antes que los demás. El líder no se contenta con lo que hay, es una persona inconformista, creativa, que le gusta ir por delante. Cuando hablo de visionario también me refiero en que tiene una gran capacidad de “ver”, es decir puede ver con “ojos” de maestro cada detalle de sus seguidores, es decir ve la realidad de una manera diferente, lo hace porque pretende modificar esa realidad, y lo hace mirando a cada uno de sus seguidores, sus gestos, palabras, sueños, no olvides que el líder busca el Bien, pues este libreo de eso se trata.


Persona de acción: el líder no sólo fija unos objetivos exigentes sino que lucha denodadamente por alcanzarlos, sin rendirse, con enorme persistencia, lo que en última instancia constituye la clave de su éxito. El líder no se contenta con soñar, el líder quiere resultados. Y para “ser de acción” debe enseñar con el ejemplo, es decir el mismo “hace” pero con paciencia y sin despersonalizar al ser humano y creer que estos son objetos de uso y desuso, el es el primer humano que humaniza en cada acción que hace, sin caer en el activismo exasperado.


Brillante: el líder sobresale sobre el resto del equipo, bien por su inteligencia, bien por su espíritu de servicio, combativo, bien por la claridad de sus planteamientos, etc., o probablemente por una combinación de todo lo anterior.


Coraje: el líder no se amilana ante las dificultades; las metas que propone son difíciles (aunque no imposibles), hay que salvar muchos obstáculos, hay que convencer a mucha gente, pero el líder no se desalienta, está tan convencido de la importancia de las mismas que luchará por ellas, superando aquellos obstáculos que vayan surgiendo. Es muy importante tener en cuanta que el líder debe ser Valiente, y lo será en la medida en que este convencido en sus ideales. El líder defiende con determinación sus convicciones, así pierda el puesto, pues si su determinación es lo suficientemente poderosa para alcanzar el éxito, entonces lo lograra y debe defender sus ideas con coraje, pasión y sin intolerancia sino mediante el dialogo


Contagia entusiasmo: el líder consigue entusiasmar a su equipo; ellos perciben que las metas que persigue el líder son positivas tanto para la organización como para los empleados. El futuro que ofrece el líder es tan sugerente que merece la pena luchar por ello. Esta es una de las características fundamentales del líder, el saber contagiar su entusiasmo, y lo hace porque el líder es conciente de su magnetismo personal que el posee, el conseguir que el equipo le siga, que comparta sus objetivos, ideales. Sin un equipo que le siga, una persona con las demás características sería un lobo solitario pero nunca un líder (el liderazgo va siempre unido a un equipo), si el líder cree que el solo lo puede hacer todo, no solo el esta perdido sino el también se pierde como perdona por un mal manejo de su autoestima y así se despersonaliza.


Gran comunicador: otra cualidad que caracteriza al líder son sus dotes de buen comunicador, habilidad que le va a permitir "vender" su visión, dar a conocer sus planes de manera sugerente.


Convincente: el líder es persuasivo; sabe presentar sus argumentos de forma que consigue ganar el apoyo de la organización. Y el líder debe convencer sin recurrir al miedo, a las inseguridades, instintos de la personas; el los convence porque él es el primer convencido y siempre lo hará con un dialogo alturado y buscando siempre la Verdad y el Bien grupal.


Gran negociador: el líder es muy hábil negociando. La lucha por sus objetivos le exige negociar continuamente, tanto dentro de la organización, como con clientes, proveedores, entidades financieras, accionistas, etc. El líder demuestra una especial habilidad para ir avanzando en el largo camino hacia sus objetivos.


Capacidad de mando: el líder debe basar su liderazgo en el arte de la convicción, pero también tiene que ser capaz de utilizar su autoridad cuando sea necesario. El líder tendrá la autoridad en la medida en que sepa que es la obediencia, saber comprender que la obediencia es un modo de ser libres, y lo seguidores respetan a la autoridad cuando ven coherencia en este, es decir el líder se gana la autoridad tanto moral o de principios en la medida que enseña con el ejemplo. El líder es una persona compresiva, pero no una persona blanda (los subordinados le perderían el respeto). El líder no puede abusar del "ordeno y mando" ya que resulta imposible motivar a un equipo a base de autoritarismo, pero debe ser capaz de aplicar su autoridad sin temblarle el pulso en aquellas ocasiones que lo requieran.


Exigente: con sus seguidores, pero también, y muy especialmente, consigo mismo. La lucha por unas metas difíciles requiere un nivel de excelencia en el trabajo que tan sólo se consigue con un alto nivel de exigencia. Si el líder fuera exigente con sus empleados pero no consigo mismo no sería un líder, sería un déspota que pondría a toda la organización en su contra y al final terminaran destruyendo al líder y podría poner en peligro la organización por la autoestima inflada y déspota de este líder.


Carismático: si además de las características anteriores, el líder es una persona carismática, nos encontraríamos ante un líder completo. El carisma es una habilidad natural para seducir y atraer a las personas, es auténtico magnetismo personal. El carisma permite ganarse al equipo, que se siente atraído por su líder. No obstante, hay que señalar que es perfectamente posible un líder sin carisma (la historia nos lo ha enseñado muchas veces). Para una empresa es preferible tener un líder sin carisma con un alto sentido de la honestidad, que un líder carismático que utilice la organización en su propio beneficio.


Honestidad: unos elevados valores éticos son fundamentales para que el liderazgo se mantenga en el tiempo. El equipo tiene que tener confianza plena en su líder, tiene que estar absolutamente convencido que el líder va a actuar honestamente y no le va a dejar en la estacada. Si los seguidores detectan que el líder no juega limpio y que tan sólo le preocupan sus propios intereses, perderán su confianza en él, proceso que una vez iniciado es muy difícil de parar.


Cumplidor: el líder tiene que ser una persona de palabra: lo que promete lo cumple. Es la única forma de que el equipo tenga una confianza ciega en él. Por eso es necesario que el líder sepa lo importante que el La Palabra, pues las palabras se han hecho para cumplirlas y la promesa es la palabra empeñada en que el hombre debe hacerla carne, es decir la promesa es la cristalización de su palabra empeñada, por tal razón el líder debe cumplirla.


Coherente: el líder tiene que vivir aquello que predica. Si exige dedicación, él tiene que ser el primero; si habla de austeridad, él tiene que dar ejemplo; si demanda lealtad, él por delante. El líder predica principalmente con el ejemplo: no puede exigir algo a sus subordinados que él no cumple. Además, el mensaje del líder debe ser coherente en el tiempo, definitivamente el gran ejemplo de coherencia viva es Jesucristo, por eso el decía “sean como yo”, con que autoridad decía eso, pues con la firmeza de que el esta seguro de que es coherente, porque el es el arquetipo de líder que debemos anhelar nosotros. El líder no puede pensar hoy de una manera y mañana de otra radicalmente distinta: confundiría a su equipo. Esto no implica que no pueda ir evolucionando en sus planteamientos.


B. REFLEXION EN VALORES
Tenacidad: "La tenacidad es la virtud que nos hace intentarlo hasta lograrlo". Miguel Ángel Cornejo


TENER PRINCIPIOS
La ley natural nos enseña que se cosecha lo que se siembra, y que la calidad y cantidad de la cosecha depende, en razón directa, de la calidad y cuidado de la siembra. Si queremos resultados, necesitamos analizar tantas posibilidades para alcanzarlos como sea posible. Si tiene bien claro el fin de lo que desea realizar, seguramente los resultados que obtenga serán los adecuados.
Lo importante no es la cima, sino el camino que se elige para llegar a ella.
Triunfar no es lo más importante, es lo único.
La responsabilidad, no la autoridad, es lo que produce resultados.
Soñar es fundamental, ponerlo en práctica es vital. Descubra el secreto de que las cosas sucedan haciéndolas ahora. Miguel Ángel Cornejo


C. ORATORIA
Preparar la intervención discursiva
A la hora de preparar el discurso hay que tener en cuenta:



a) Público asistente: el discurso tiene que ser apropiado para el público que va a asistir. Hay que ver qué temas le pueden interesar, cual puede ser su nivel de conocimiento sobre el mismo, hay que utilizar un lenguaje adecuado, tener en cuenta si conoce o no términos técnicos, etc. No es lo mismo explicar los resultados del ejercicio a la junta general de accionistas, que a los empleados de la sociedad. En el primer caso será un discurso mucho más formal. Tampoco es lo mismo hablar sobre el cambio climático ante una comisión de científicos, que en un colegio mayor. El nivel de precisión y el lenguaje técnico que se pueden utilizar son muy diferentes en ambos casos. Tampoco es lo mismo hablar ante 10 personas que ante 1.000. En el primer caso hay más posibilidades de interacción con el público, más cercanía; en el segundo caso el discurso tenderá a ser mucho más formal.



b) Objeto de la intervención. Hay que tener muy claro el motivo de la intervención. Felicitar a los seguidores por los buenos resultados, comunicar un recorte de plantillas, felicitar a un empleado por sus 25 años en la empresa, convencer al público para que vote por un determinado partido político, etc. El discurso puede tener por objeto informar, motivar, entretener, advertir, amonestar etc., y en función de ello habrá que adaptar el estilo del mismo: formal o informar, serio o entretenido, cercano o distante, monólogo o participativo, etc.



c) Tema a tratar: según el tema que se vaya a tratar el estilo del discurso puede ser radicalmente diferente. No es lo mismo hablar en el Pleno del Ayuntamiento sobre los presupuestos del año, que sobre la organización de las fiestas patronales. No es lo mismo dirigirse a los empleados para explicarles los resultados del año, que presentarles los nuevos objetivos. En el primer caso se busca comunicar (lenguaje preciso) y en el segundo motivar (discurso más apasionado y entusiasta).



d) Lugar de la intervención. El lugar del acto imprime también carácter. No es lo mismo hablar en un auditorio, en la sala de reuniones de la empresa, en una fiesta de cumpleaños, en un banquete de boda, en los salones de una parroquia, etc.



e) Tiempo de la intervención: el tipo de discurso será completamente diferente dependiendo de si va a durar 5 minutos o si va a durar una hora y media. Las posibilidades de improvisar, de profundizar en la materia, de estructurar el discurso (introducción, desarrollo y conclusión), de utilizar fichas de apoyo, de utilizar transparencias, etc.), varían en uno y otro caso. Todos estos aspectos habrá que tenerlos en cuenta a la hora de definir el tipo de intervención que se quiera presentar.




Lic. Manuel Calle Reyes (autor)

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Un curso con un desarrollo practico aplicado a cualquier tipo de profesión

Anónimo dijo...

ESTE ES UN CORSO SENCILLO PERO MUY PRÁCTICO; Y ES APLICABLE PARA CUALQUIER ORGANIZACIÓN O DEPENDENCIA.

MARTHA AVALOS OCHOA dijo...

ESTE CURSO ES MUY BUENO PARA ACTUALIZAR E INCREMENTAR LAS HABILIDADES DE UN LIDER, SABIENDO QUE TIENE LA CAPACIDAD DE ORIENTAR Y CONDUCIR A OTRAS PERSONAS PARA CONCRETAR LOS OBJETIVOS Y METAS DE UNA ORGANIZACIÓN.